Nuestra historia
Ubicado en el corazón de Galicia y rodeado de frondosos bosques de robles y tilos, cuenta con una historia que se remonta 191 años atrás. Desde su fundación en 1816, ha sido un punto de referencia en el ámbito de los balnearios de aguas minero-medicinales, destacando por sus propiedades curativas
La salud y el bienestar de sus clientes son la principal prioridad del balneario
Durante casi dos siglos, el Balneario de Carballiño ha sido testigo del alivio y la sanación que sus aguas proporcionan a sus visitantes, consolidándose como un destino de salud y bienestar. Ilustres personalidades, como la escritora Doña Emilia Pardo Bazán, han encontrado en este oasis de tranquilidad no solo un refugio, sino también una fuente de inspiración.
El balneario cuenta con el respaldo de destacados profesionales médicos, como el doctor y catedrático de la facultad de Medicina de Madrid, Don José San Román y Rouger. Tras examinar a miles de pacientes tratados con las aguas del balneario, ha confirmado la eficacia de estas aguas en el tratamiento de numerosas afecciones hepáticas y gastrointestinales, logrando la desaparición completa de sus síntomas.
Las aguas del Balneario han sido sometidas a exhaustivos estudios y análisis para determinar sus beneficios, siendo catalogadas como aguas medicinales de una calidad muy singular, puesto que solo se encuentra parangón en Balnearios no españoles, como el de Montecattini en Italia.
A 28,5 km de Orense
A 85 km de Santiago
A 154 km de A Coruña
El agua
El balneario de Carballino es conocido por sus aguas minero-medicinales, las cuales emergen a una temperatura cálida, oscilando entre los 23ºC y los 28ºC, presentando una apariencia clara e insípida. Su reputación se ha forjado gracias a su eficacia en el tratamiento de diversas dolencias. Estas aguas se caracterizan por ser sulfurado-sódicas, alcalinas, fluoradas y litínicas, ofreciendo así una combinación única de propiedades terapéuticas para el bienestar de los visitantes.